En Visto/
Dora De la Cruz
El fuero constitucional, esa figura creada para proteger la función pública y evitar que el ejercicio político se viera entorpecido por intereses ajenos, ha perdido, en algunos casos, el propósito para el cual fue concebido. Originalmente, el fuero buscaba proteger a las y los legisladores de cualquier tipo de persecución política, asegurando que pudieran desempeñar su labor sin presión ni represalias.
Sin embargo, lo que fue una herramienta para fortalecer la democracia, se ha convertido en un escudo para proteger a quienes deberían rendir cuentas. Hoy en día, muchos políticos no solo buscan ocupar cargos públicos por vocación de servicio a la ciudadanía , sino que el fuero es un pase a la impunidad. No es raro ver cómo personajes con antecedentes de corrupción, malos manejos administrativos, e incluso investigaciones judiciales abiertas, se lanzan a la búsqueda de posiciones con fuero, con el único fin de blindarse ante cualquier proceso legal en su contra.
Es decir, lo que alguna vez fue un mecanismo legítimo de protección se ha distorsionado al grado de volverse, en algunos casos, el refugio de aquellos que quieren evadir la justicia.
Ya era tiempo y resultaba necesaria una reforma a fondo para devolverle su propósito al fuero. Es decir, que los políticos, al igual que cualquier ciudadano, enfrenten la ley si cometen algún delito. Por eso, las reformas a la Ley Interna aprobadas por el Congreso del Estado impedirán que diputadas o diputados con juicios penales abiertos, obtengan fuero y será por mayoría de votos, que se eliminará temporalmente inmunidad, en sesión del pleno legislativo.
De esta forma, cualquier integrante de la legislatura que enfrente un caso de denuncia por presunto delito tendrá que enfrentar la justicia y, en caso de resultar inocente, podrá regresar a su cargo con todo y su fuero.
Pero también se reformo la ley interna, para que los integrantes de la nueva legislatura, deban identificarse plenamente para acceder al recinto, es decir, tendran su credencial de diputados y diputadas.
Algunos se adjudicaron el nombre de la ley, como si fueran merecedores de ese reconocimiento, específicamente , el diputado local pluri, Isamel Garcia Cabeza de Vaca, a quien nuevamente le regalan un curul, y quien ahora sale a las redes, porque fisicamente no se aparece por ningun lado, para decirse victima de persecución.
El politico que dice tiene mas de 20 años de trabajo politico, nunca se le conoce haber aportado un beneficio para el pueblo de Tamaulipas, un dedo no ha movido, para ayudar a la ciudadanía y en la cámara de senadores, solo se supo de su nombre, por haber compartido en plena sesion, a través de su celular fotos de una mujer .
Mañana, tendrán que presentarse, todas y todos los diputados electos, para obtener su credencial, veremos, si el diputado Ismael, se presenta al Congreso del estado, para, solicitar su credencial y tener acceso al recinto.
Así que, como siempre, se hará acompañar por agresores del Partido Acción Nacional, en bloque para armar otra trifulca y luego decirse agredidos. Esta historia ya la conocemos: la tienen escrita en su manual ideológico.