Cd. Victoria, Tam.-. El coordinador de la fracción albiazul en el Congreso local, FELIX, Moyo, GARCÍA AGUIAR y su compañero de lucha, a la sazón presidente estatal del PAN, LUIS RENÉ, Cachorro, CANTÚ GALVÁN, empiezan a sentir en carne propia el calvario que sufrió su vecino guinda, el psicólogo ARMANDO ZERTUCHE ZUANI.
El llamado “síndrome ZERTUCHE”. Aquella noche oscura del alma cuando su fracción perdió mayoría y con ello la presidencia de la JUCOPO, pues cuatro de sus diputadas emprendieron mudanza brincando de alegría rumbo a la bancada panista.
Ya le comenté aquí sobre dicho grupo de tránsfugas que se salieron del huacal acatando ofertas imposibles de rechazar, formuladas en tiempo y forma por cierto flautista del tercer piso, quien después figuraría como candidato a gobernador. Fallido, por cierto
Las primeras en brincar la alambrada fueron LETICIA SÁNCHEZ GUILLERMO y LIDIA MARTÍNEZ LÓPEZ en septiembre del 2021. Les seguirían NANCY RUIZ MARTÍNEZ en marzo del 2022 y LETICIA VARGAS ÁLVAREZ en junio del mismo 2022.
Para más detalle, le remito a mi columna de la semana pasada. (Interiores, “Jucopo y las renegadas”, lunes 16 de enero de 2023, https://tinyl.io/7kV7).
Lo cual se empezó a revertir luego de que AMÉRICO VILLARREAL ganó la elección en junio pasado. Mejor aún, se diría que el regreso de las renegadas al redil morenista obedeció a una simple y llana actualización, con las variables y constantes que el caso ameritaría.
¿Nuevo gobernador?, distinto color partidista, renovado esquema de fidelidades. Esta es la parte variable. La constante es que seguirán alineadas al Poder Ejecutivo, ahora en otras manos.
Gracias a dichas almas arrepentidas (¡ovejas negras que retornaron al redil!) MORENA pudo recuperar el control parlamentario, retirar al “Moyo” GARCÍA de la oficina principal y sentar a doña ÚRSULA (mejor conocida como La Prima) SALAZAR MOJICA en la presidencia de la JUCOPO (Interiores, “Jucopo, víbora en viernes”, viernes 13 de enero de 2023, https://tinyl.io/7kW3).
FILIACIONES EN TRÁNSITO
Pero la cosa no para ahí. En este ir y venir de las fracciones parlamentarias, es esa intensa permuta de lealtades que parece marcar a la LXV legislatura estatal, la rueda de la fortuna ya dio un nuevo vuelco. El péndulo está de regreso.
La marea arrastró nuevas conquistas. Muerto el rey, viva el rey, ¿ya no está el jefe CABEZA?, bueno, el apellido puede cambiar, lo fundamental es alinearse con quien manda, sin distingo de banderas partidistas.
Entre 2021 y 2023, han sido cambios de camiseta del guinda al azul y del azul al guinda que en el fondo revelan la escasa consistencia ideológica de la vida partidista regional. Chaquetazos de ida y vuelta que ni por asomo se inspiran en doctrina o principios.
Unas y otras se parecen tanto en pragmatismo y ambiciones que resultan perfectamente intercambiables. Es por ello que en la actual marometa del destino no solamente se reincorporaron las renegadas.
Además están en calidad de disponibles las dos expulsadas del PAN quienes (por lo pronto y en calidad de mientras) se declararon independientes, en espera de su estatus definitivo. Ambas matamorenses.
Estas son, la exdirectora del ITCA y exsenadora suplente SANDRA LUZ GARCÍA GUAJARDO y también LINDA MIREYA GONZALEZ ZUÑIGA es funcionaria de SEBIEN y exdirectora del Instituto Municipal de la Mujer en el mismo puerto.
En el caso de SANDRA LUZ, oiga usted. Esa militancia albiazul que ahora deja atrás viene, al menos, de los años noventa, cuando estuvo casada con el empresario y alcalde RAMÓN ANTONIO SAMPAYO, siendo ella titular del DIF municipal (1996-1999).
Además fue directora del Instituto Matamorense para la Cultura y las Artes (IMACULTA) durante aquel polémico ayuntamiento que presidió NORMA LETICIA SALAZAR (2013 y 2015).
Y luego suplente de PACO CABEZA en la aventura senatorial del 2012. Ganaron juntos, después ella ocuparía el escaño cuando el reynosense pidió licencia en enero del 2016 para asumir la candidatura a gobernador.
El propio CABEZA se la trajo a la dirección del ITCA, tras la renuncia a dicho cargo del pintor LUIS SOTTIL CICERO, en febrero de 2018.
DESERCIONES VARIAS
Quedaría en el aire un detalle que anima a los chismorreos de pasillo, elevador, café y cantina, como es el dilucidar, precisar, aclarar, tomar nota para el registro histórico, quién les sacó realmente la tarjeta roja a SANDRA LUZ y LINDA MIREYA.
Es decir, quien expulsó a las diputadas de su paraíso celeste, ¿el Moyo o el Cachorro?… Pregunta ociosa, tal vez, allá que lo discutan. La nota es que ahora están fuera y además encaminadas hacia el rebaño de doña ÚRSULA. Nueva matriarca en esta suerte de MACONDO legislativo.
Con lo cual se sigue inclinando la balanza (pian pianito, hemos comentado aquí) hacia el lado oficialista y con ello se empieza a ver cada día más cerca el umbral crítico. Coyuntura decisiva, gota que derrama el vaso.
Esto que en términos dialécticos se conoce como la acumulación cuantitativa que permite el salto cualitativo y donde el grupo gobernante podrá adoptar decisiones impostergables en materia de justicia.
Como por ejemplo, terminar de sacudirse a los dos fiscales cabezones, IRVING y el otro, el que llora mucho, ¿cómo se llama?, ah sí, RAMÍREZ. Ya se van.
Cabe reparar que en el reacomodo intensivo de curules no vemos varones. Lejos estoy de afirmar que el fenómeno se explique o agote como tema de género. Núncamente pero (ojo) quienes han brincado y siguen saltando en una dirección y en otra son todas mujeres.
Seis en total, en principio las dos LETICIAS, LIDIA y NANCY. Ahora SANDRA LUZ y LINDA MIREYA. Primero cuatro y luego dos, de diferentes organizaciones, trayectorias, escolaridad y militancias. Razón habrá, motivos tendrán.
BUZÓN: lopezarriagamx@gmail.com