Redacción /
CDMX/15 Marzo 2022
La Auditoria Superior de la Federación(ASF) hizo fuertes señalamientos según el reporte realizado por la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes quienes recibieron los frentes consecutivos de la contratista, pese a inconformidades detectadas por la empresa encargada de la asesoría, control y seguimiento del proyecto y hubo observaciones a pagos por 27.7 millones de pesos.
De esas observaciones, 16.7 millones de pesos se refieren a conceptos no previstos en el catálogo original, por la incorrecta ejecución de la contratista en el concepto de anclas en el muro de Tierra Armada.
Más de seis millones fueron observados por no contar con el soporte de ejecución de los turnos pagados a la contratista en el concepto EXT-709 «seguridad armada con cuatro elementos de 24 por 24 horas de lunes a domingo y una patrulla».
Otros 2.2 millones por trabajos con deficiencias en las soldaduras de la pasarela peatonal del frente número cuatro «casetas», pues de acuerdo con los reportes de la proyectista se comprometió la integridad de diversos elementos del puente peatonal por deficiencias en la ejecución y 709 mil pesos por la integración de un concepto no previsto en el catálogo original sobre la pasarela peatonal, donde se acreditaron parcialmente los costos de los tiempos de maquinaria en reserva.
Otros 3.1 millones por diferencias de volúmenes pagados contra los soportados en los números generadores de la estimación número 650 extraordinaria en el concepto «desazolve de material húmedo» y 655 mil pesos por realizar pagos por trabajos ejecutados en el centro de salud T1 en la demarcación territorial Álvaro Obregón, con recursos del programa del tren interurbano, sin contar con la justificación correspondiente.La ASF auditó 216 millones 515 mil pesos, es decir, el 41.5% de los recursos usados para esos trabajos.
Durante la segunda entrega del ejercicio 2020 la ASF realizó observaciones a tres obras del Tren Interurbano México – Toluca por 323 millones 293 mil pesos por pagos improcedentes, integración de conceptos no previstos en el catálogo original, cálculos y ajustes incorrectos, entre otros.
El tren fue iniciado en el Gobierno de Enrique Peña Nieto y lleva ocho años de construcción. Todos esos ejercicios la ASF ha realizado observaciones principalmente por pagos improcedentes, diferencias de volumen entre lo cuantificado y lo pagado, incorrecta integración de conceptos no previstos en el catálogo original.
La anterior administración planeaba concluirlo en 2018, pero lleva más de tres años de retraso y sobrecostos. El gobierno de Andrés Manuel López Obrador prevé concluirlo en el 2024.
En cuanto al Gobierno de la Ciudad de México, la ASF consideró que no se realizó un adecuado control y seguimiento de la bitácora electrónica de obra pública y hubo pagos por 8.6 millones, de los cuales, 4.8 millones fueron por la duplicidad de pagos y ajuste de costos de los días domingos y festivos, contenidos en el cálculo del factor del salario real de la contratista.