EN VISTO/
Por Dora De la Cruz
La llegada de la tormenta tropical «Alberto», puso a prueba a todo el gabinete estatal, que se movilizó para prevenir, actuar y atender cualquier situación de riesgo por las fuertes y abundantes lluvias, que no se veían en Tamaulipas desde hace dos décadas.
Los resultados están a la vista: saldo blanco, informó puntualmente al pueblo tamaulipeco el gobernador Américo Villarreal.
En otros gobiernos, específicamente durante el sexenio del Partido Acción Nacional, se utilizaban las situaciones de dolor de la población, la inseguridad y las pandemias para sacar provecho y hacer negocios con el erario estatal. Hoy vemos una administración que pone en primer lugar a la población.
Hace 15 días, antes de que se formara la depresión tropical, pero ya se pronosticaba, el gobernador Américo Villarreal comentaba con un grupo de periodistas sobre una estrategia de prevención para recibir a «Alberto». La meta era proteger a la población y aprovechar la llegada del agua ante la crisis de sequía que enfrentaba Tamaulipas.
Durante la sesión del consejo de Protección Civil, cada integrante del gabinete estatal explicó las estrategias y acciones, que ya estaban en marcha para cualquier eventualidad, utilizando los recursos destinados para proteger y apoyar a quienes necesitaran ayuda.
En la mesa de Protección Civil, el gobernador solicitó información precisa a los responsables. Preguntó si tenían listas las escuelas de refugio en la zona de La Pesca y pidió al titular de Salud, tener lo necesario para atender a pacientes y personas en caso de apagones.
La cultura de la prevención, en Tamaulipas, se puso a prueba con el actual gobierno de Américo Villarreal Anaya, obteniendo resultados favorables, especialmente en el cuidado de las personas.
El discurso convence, pero el ejemplo arrastra. El trabajo previo a la llegada de «Alberto», fue una labor conjunta de alcaldes y autoridades, de todos los poderes del estado, quienes monitorearon y ejecutaron acciones preventivas para recibir las lluvias.
Siempre se reportan noticias lamentables durante los fenómenos meteorológicos, pero mucho tiene que ver la falta de trabajo de prevención y protección a la ciudadanía. Esta vez, «Alberto» trajo agua y buenas noticias para Tamaulipas. «Llovió bonito», dicen, porque no se reportaron situaciones que lamentar.
La cultura de la prevención y el trabajo en equipo fueron los pilares, ante la tormenta tropical «Alberto» en Tamaulipas. El saldo fue blanco y mucha agua, reservas que se deben cuidar al máximo.
La prueba de fuego en esta tormenta fue un esfuerzo conjunto. Ahora, lo que sigue es una intensa campaña para el cuidado del agua y la aplicación de los recursos públicos, para mantener una red en permanente mantenimiento y reforestar los 43 municipios, para implementar una política pública en el desarrollo sustentable.