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Esto todavía no termina

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En visto| Dora de la Cruz

Las elecciones ya pasaron y hubo lecciones que se deben aprender por parte de las y los actores políticos que jugaron un papel protagónico al interior de los partidos políticos, tanto en los aspectos positivos como en los que habría que mejorar, para quienes asumirán los cargos, así como para la ciudadanía.

Habría que hacer un análisis de la participación ciudadana, tomando en cuenta que ahora se derrotó al abstencionismo al registrarse una participación del 56.35 por ciento en Tamaulipas, lo que merece examinar cuál fue la población con mayor participación, es decir la  dinámica del voto, los niveles de participación en comparación con elecciones anteriores y qué factores pudieron haber influido en el aumento de votantes.

En esta jornada electoral, quedó demostrado que el fraude no tiene cabida cuando la ciudadanía se moviliza. A pesar de los intentos de la oposición, que fueron denunciados previamente un día antes de la elección por parte del partido de Morena, el voto ciudadano fue factor decisivo.

La reciente elección también ha dejado el replantear el sistema de conteo de votos por la lentitud con la que el Instituto Electoral los ha contado los votos, por ejemplo, hubo ocasiones, en la que el instituto electoral de Tamaulipas, congelaba el conteo de voto por voto en la página oficial, provocando la especulación de la ciudadanía. Este fenómeno ha desatado todo un debate que tendría que ser revisado para pasar de la burocracia en el conteo de voto a formas más eficientes.

Esta complejidad de conteo de votos no es cosa fácil; tampoco es solo sumar boletas. Implica verificar la autenticidad, resolver impugnaciones y asegurar la integridad del proceso. Sin embargo, sí estuvo cardíaco el conteo de votos, lo que llama a eficientizar el sistema.

Lo más importante en esta pos jornada son las promesas de campaña. La ciudadanía tiene memoria y ha castigado con el voto de rechazo a quienes no cumplen. Los y las candidatas que ganaron las elecciones tienen una deuda con  los sectores de la sociedad: cumplir con lo prometido. Es hora de demostrar con hechos que la democracia se respeta y se defiende con transparencia y eficiencia.

Un papel relevante fue la participación ciudadana en las casillas y las y los representantes de los partidos políticos, que desempeñaron un papel crucial en la defensa del voto por voto. Estos ciudadanos y ciudadanas no solo ejercieron su derecho al voto, sino que también se convirtieron en defensores de la transparencia y la legitimidad del proceso electoral. Su dedicación y vigilancia aseguraron que cada sufragio fuera contado, lo cual es fundamental para fortalecer la democracia y la confianza pública en las instituciones electorales.

En resumen, la presencia y la acción conjunta de los ciudadanos y los representantes de los partidos políticos en las casillas son fundamentales para la integridad del proceso electoral. Su compromiso no solo resguarda la transparencia de los comicios, sino que también fortalece la confianza en la democracia, recordándonos que cada voto cuenta y debe ser defendido.

Las campañas políticas no terminan con las votaciones; de hecho, ese es solo el principio de una nueva fase en el compromiso político.

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